jueves, 4 de octubre de 2012

Estudio señala que beber mucha agua es inútil y no adelgaza


Estudio señala que beber mucha agua es inútil y no adelgaza


cho vasos al día pueden ser excesivos. El cuerpo solo asimila líquido que necesita, según estudio.

La eterna recomendación de tomar ocho vasos de agua al día para mantenerse saludable no tiene fundamento científico, sostienen investigadores en un estudio publicado recientemente en Australian and New Zeland Journal of Public Health.
De acuerdo con estos científicos -cuyas conclusiones se suman a la creciente evidencia sobre el tema producida durante la última década-, dicha recomendación es fruto de una mala interpretación del consumo adecuado de líquidos.
En otras palabras, lo ideal es que el cuerpo reciba al día entre 2 y 2,5 litros, una cantidad que suele alcanzarse, naturalmente, con el contenido de los alimentos (además de las verduras y las frutas) y otras bebidas, como café, chocolate, jugos, té y hasta las gaseosas. Eso sería suficiente. "De hecho, agregarle a esa cantidad ocho vasos de agua podría ser excesivo; estaríamos bebiendo demasiada agua", dice Spero Tsindos, del Departamento de Dietética y Nutrición Humana de la Universidad de Latrove (Australia).
Según los autores del estudio, con los cuales coincide Françoise Lette, especialista de la Clínica Mayo de Jacksonville (Florida, Estados Unidos), beber cantidades enormes de agua es inútil, porque no se distribuye de manera específica en el organismo y tampoco sobrehidrata; es más, en personas normales el sobrante es eliminado por la orina.
Eso no quiere decir que la gente no deba tomar agua. Es más, este líquido constituye el 60 por ciento del peso del cuerpo y todas sus funciones dependen de ella. Pero ¿cómo saber cuándo tomarla?
Para los nefrólogos Dan Negoianu y Stanley Goldfarb, la respuesta es muy sencilla. En un artículo publicado en julio del 2008 en Journal of the American Society of Nephrology, estos especialistas sostienen que "el agua hay que tomarla cuando se sienta sed". Ellos mismos reconocen no tener idea de dónde surgió la creencia de que ocho vasos del líquido al día sirven para eliminar toxinas y mejorar el funcionamiento de los órganos. Es un mito.
Leyendas urbanas
1. Baja de peso
El agua suele incluirse como otro componente en planes y programas alimentarios para bajar de peso, porque se cree que al tomar más líquido la gente se siente más llena y tiende a comer menos, pero no porque el agua per se sirva para quemar grasas y bajar unos kilos. En ese sentido, este es un mito.
2. Mejora la piel
"Tomar mucha agua le aporta lozanía a la piel", dicen muchos manuales de salud y belleza. No obstante, la afirmación es falsa. Si bien es cierto que la deshidratación puede evidenciarse, ningún estudio ha demostrado que tomar agua en exceso hidrate la piel para que luzca mejor.
3. Previene la flebitis
Curiosamente, tomar más líquidos expande las venas de las piernas y de la pelvis. Por eso se cree que personas con tendencia a la flebitis (inflamación de las venas y producción de trombos) deben tomar mucha agua. Por el contrario, es mejor reducir su ingesta, sobre todo si están mucho tiempo quietas.
4. Elimina toxinas
No hay evidencia científica a favor o en contra de que tomar agua elimine toxinas. El agua facilita el funcionamiento de los riñones, órganos encargados de eliminar toxinas; pero consumir grandes cantidades puede provocar que merme el funcionamiento del riñón y el sistema urinario.
Sí hidrata
Si la actividad física es fuerte y se pierden agua y sales minerales a través del sudor, es necesario compensar. Cuando una persona se encuentra severamente deshidratada, deja de transpirar, por lo que el cuerpo experimenta fatiga y debilidad. Pero el líquido se debe tomar siempre que haya sed y no sin que el cuerpo lo pida.
El líquido que debe consumir
En condiciones normales, cada día el cuerpo pierde entre 2.000 y 3.000 centímetros cúbicos de líquido. Aunque no hay fórmulas, especialistas recomiendan hacer un cálculo simple: tome la mitad de su peso en libras y divídalo entre ocho. El resultado es la cantidad de líquido que debe consumir, pero no solo de agua, sino incluyendo el que contienen las comidas. Si usted pesa 80 kilos (160 libras), divida 80 libras entre 8 (se sabe que un vaso de agua tiene, en promedio, 8 onzas). El número que le da es 10 vasos de líquidos al día. Eso equivale a 2,4 litros.


F  eltiempo

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